Caosmos
Crónicas en los últimos tiempos de la humanidad
por Estíbaliz Solis
Ultimamente podemos escuchar a diario los noticieros hablando de la crisis, la estrategias de supervivencia de las empresas, las promociones extremas, la inestabilidad de la banca…Contra ello también ha surgido publicidad optimista y soluciones cristianas, por ejemplo. La economía colapsa y nos colapsan las mentes. Para algunos sectores pareciera sospechoso que en nuestro país se observe una gran producción artística y teatral, los espacios programados para todo el año, los fondos repartidos, los actores ocupados… Una economía requebrajada no produce por sí misma una crisis. La necesidad la produce, el faltante que me sostenía como persona; no sólo la supervivencia, sino el espacio que me ha sido asignado en el enramado y que ya no tengo, las necesidades aprendidas, mi trabajo como consumidor. El ser humano se mueve desde la crisis. Estamos en crisis desde siempre, la historia lo demuestra: las crisis provocan las revoluciones y las revoluciones provocan que conciencia de las personas despierte. Los grandes acontecimientos sociales vienen de las catástrofes de la humanidad. A todo esto un principio esencial demostrado por el movimiento ritual de las culturas, sin caos no hay cosmos. El deprendimiento ritual de los espacios otorgados por el poder, para luego instalar el desequilibrio y la fuga, genera una enorme cantidad de energía para revertir en el ordenamiento que un día volverá a ser dislocado.
En esta coyuntura se mueve Caosmos, espectáculo inaugural de la Expo UCR 2009, bajo la dirección de Fernando Vinocour. La palabra “exponer” connota algo más allá de mostrar una serie de proyectos con vinculación universitaria. Pareciera que “exponer” abre un puente menos restrictivo entre el observador y el exponente. El exponente se fragiliza y el observador se empapa; por tal motivo, el espectáculo inaugural de esta apertura universitaria, no podía ser otro. La universidad es un ente político, los grandes movimientos sociales se han producido de alguna forma desde la universidad o atravesándola. 
Teatrum mundi: ampliamos el escenario
Así se manifiesta Mercutio, personaje shakespereano que deambula las aulas de este montaje. Así como lo hace Artaud, Brecht, Hamleta y Hamlet, aparentes fantasmas de la conciencia. El espectáculo está construido desde textos de varios autores, como los son Peter Handke y Aristides Vargas, pero también con la presencia de “Los ciudadanos”, personajes de la obra pero también autores históricos de gran parte de textos, tomados de consignas sociales, graffitis y poemas. La obra atraviesa tres ejes estructurales, los mismos que atraviesa la universidad, como actor social. Por un lado, la educación: primaria, secundaria y práctica; la de la calle. Por otra parte, la política, el poder y el orden oficial y con él, finalmente el orden social, en resistencia al consumo obligatorio, la represión de roles y la deshumanización dictada por el mercado.
El escenario será, por una parte, nuestra sociedad y por otra el pretil de la Universidad de Costa Rica, donde los días 3 y 4 de abril a las 6:00 p.m. ocurrirá el espectáculo, que más que una gran obra de teatro pareciera ser un acontecimiento. Tomará además el edificio de Estudios Generales y sus alrededores, pues cuenta con más de cien participantes de distintas áreas artísticas y universitarias. Además del espectáculo pareciera ser, según se escucha dentro de las instancias universitarias, que en ése evento se dará a conocer una figura, que hasta ahora ha sido llamada “el gran maestro” y que tomaría un puesto importante dentro de la Universidad, sin embargo hasta ahora no se ha oficializado de quién se trata.
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La Malacrianza 
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